La cabeza gigantesca de la monstruosa serpiente se asomó a través del hueco del túnel de la izquierda. Tan gigantesca era que prácticamente llenaba la mitad del hueco del túnel. Si su cuerpo era proporcional a esa cabeza, aquello tenía que ser el terror de cualquier ser vivo. Y también de la criatura del sótano...
Pero entonces, lo percibió claramente: esa serpiente no era sólo un ser vivo monstruoso sino que había algo en ella maligno, que era lo que la criatura había percibido desde un principio.
La serpiente evaluaba la pequeña habitación en la que desembocaban ambos túneles. Para ello, incansablemente sacaba y metía su lengua bífida pero calmadamente, como si supiera que habría pocas criaturas que osaran enfrentarse y aún menos ganarla.
De repente, habló con una voz melodiosa y aterciopelada pero amenazante que hubiera aterrorizado al más valiente:
- Sé que esssstásssss ahí, te aseguro que no te va a ssssser de ninguna utilidad esconderte. Cuando te encuentre, lo vassss a passssar aún peor- Cada vez que pronunciaba una "s", sacaba la lengua porque quería estar segura de dónde estaba aquella criatura que sentía cerca.
La voz sorprendía por su tono melodioso: era hipnótica, como si ya con sólo hablar convenciera a su interlocutor de hacerle caso y someterse a su voluntad. Pero nada iba a convencerle a la criatura de los sótanos de salir de su escondite: iba a seguir pegada a la pared hasta que aquella cosa se fuera de los alrededores.
De repente, se oyó un ruido:
-Miauuuu...
Un gato anaranjado, bastante grande y de ojos amarillos había aparecido en escena, persiguiendo a un desafortunado gorrión que se había perdido por los intrincados pasillos de los sótanos. Finalmente, lo había atrapado y ahora lo llevaba en la boca para darse un festín en su guarida.
La serpiente bajó la cabeza para poner los ojos a la altura del gato que salió corriendo hacia un agujero en la pared. La monstruosa serpiente intentó perseguirlo pero era demasiado grande y pesada y el minino simplemente desapareció en la pared con su presa.
La entidad sintió el golpe que dio la serpiente contra la pared donde estaba escondido, en persecución del gato y creyó que iba a descubrirse pero no fue así. Sí oyó que volvía a sacar la lengua varias veces seguidas para tantear el ambiente y viendo que no podía distinguir que hubiera nadie más aparte del gato, simplemente se paró en medio de la habitación como esperando a detectar algo más o a que alguien se descubriera pero nada pasó. Así que, considerando que tenía órdenes concretas de investigar qué había pasado con los tres asaltantes del templo, comenzó a deslizarse a través del túnel que llevaba a la nave principal del templo.
En ese momento, la criatura, si hubiera tenido pulmones, habría respirando hondo, porque ahora ya empezaba a tener una idea de lo que había percibido desde el principio: aquella serpiente inteligente, gigantesca y poderosa se había aliado con aquella presencia maligna que había podido distinguir desde el principio con nitidez. Ahora, mientras se iba alejando, entendió que tenía que darse prisa en despertar al calvo, aunque dudaba que pudiera hacer algo frente a lo que se deslizaba por el túnel.
Foto de Jan Kopřiva en UnsplashAnteriores:
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...Y en Ivoox.
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The snake in the corridor:
The giant head of the monstrous serpent peeked through the tunnel hole on the left. It was so gigantic that it practically filled half of the tunnel's hole. If its body was proportional to that head, that had to be the terror of any living being. And non-living ones too, creature in the basement included...
But then, the creature perceived it clearly: that serpent was not only a monstrous living being but there was something evil, malignant in it, which was what the creature had perceived from the beginning.
The snake evaluated the small room into which both tunnels emptied. To do this, it tirelessly (but calmly) pulled out and inserted its tongue, as if it knew that there would be few creatures who dared to confront it and even less win against it.
Suddenly, it spoke in a melodious, velvety but threatening voice that would have terrified the bravest:
- I know that you are there, I assure you that hiding won't be of any use because I will find you in the end. And when I find you, you’re going to feel all my rage- Every time it pronounced an "s," it’d stick out its tongue because it really wanted to be sure where that creature it felt nearby, actually was.
Its melodious tone was astonishing: it was hypnotic, as if by just talking it would convince its interlocutor to listen carefully and submit to its will. But nothing was going to convince the creature in the basements to come out of his hiding place: he was going to stay glued to the wall until that thing left the surroundings.
Suddenly, a noise was heard:
-Miauuuu... .
A rather large, yellow-eyed orange cat had appeared on the scene, chasing an unfortunate sparrow that had been lost through the intricate corridors of the basements. Finally, the big cat had caught it and now it was carrying the little bird in its mouth to feast in its lair.
The snake lowered its head to put its eyes at the height of the cat's but the feline was much quicker and ran towards a hole in the wall. The monstrous snake tried to chase the feline but the serpent was too big and heavy and the cat simply disappeared on the wall with its prey.
The entity felt the snake strike against the wall where he was hidden, in pursuit of the cat and believed that he was going to be discovered but nothing happened. He heard the snake pulling out its tongue several times in a row to feel the atmosphere and seeing that it could not distinguish that there was anyone besides that cat, it simply stood in the middle of the room as if waiting to detect something else or for someone to discover himself out of fear but nothing happened. So, considering it had concrete orders to investigate what had happened to the temple’s assailants, the snake began to slip through the tunnel leading to the temple’s main nave.
At that moment, the creature, if he had had lungs, he would have breathed deeply, because now it was clear what that snake was: that intelligent, gigantic and powerful being had allied itself with that evil presence that he had been able to distinguish from the beginning with sharpness. Now, as it went away, the creature understood that he had to hurry to wake the bald man, although he doubted that the guardian could do anything about what was sliding through the tunnel...
Sigue el interés de la historia, Mercedes, y continúa con la misma tensión en esta entrega. Seguiré atento a la continuación.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo :-)
Hola, Miguelángel. Gracias por pasarte y comentar.
EliminarEn cuanto a la continuación, este es el capítulo 3 y ya hay publicados 12... 📖
Abrazos. 🤗